Calefacción
Estudio, asesoramiento y diseño de los sistemas de calefacción, para su posterior ejecución. Con una variedad de tecnologías de alta eficiencia que permiten calentar tu hogar de forma segura, económica y respetuosa con el medio ambiente. El cambio de energías en la instalación de elementos de regulación y control tiene como finalidad conseguir eficiencia y ahorro energético.
Radiadores
Radiadores de aluminio.
Radiadores por elementos, fabricados en aleación de aluminio fundido inyectada a presión. El resultado, un aspecto de gran calidad y belleza.
Radiadores de baja temperatura
Es la nueva gama de altísima emisión con un salto térmico de 30º C, ideales tanto para obra nueva como para mercado de reposición. Son válidos para instalaciones bitubo o monotubo y de fácil mantenimiento.
Ventajas:
-Posibilidad de trabajar con equipos de aerotermia a funcionamiento solo de calefacción.
-Idoneidad para adaptarse a calderas de nueva generación.
-Baja inercia térmica.
-Facilidad de adaptación a cada tipología de instalación.
-Rápida, sencilla y económica instalación.
Radiadores de diseño.
Aunque los radiadores convencionales continuan siendo los más comunes en la mayoría de los hogares, cada vez es más habitual encontrar gente que apuesta por radiadores de diseño moderno a la hora de elegir los radiadores de su casa.
Suelo radiante
La calefacción por suelo radiante es uno de los sistemas más eficientes en la actualidad, en cuanto a sistemas de calefacción pasiva se refiere. Este sistema permite ahorros del 25-30% de energía, porcentaje que se incrementa cuando trabaja con sistemas de energía solar con gran poder de estratificación.
Ventajas:
- No reseca el ambiente, y al no existir convección de aire no se mueven las partículas de polvo e impurezas, mejorando la calidad del ambiente.
- No quita espacio, al ser un sistema invisible de calefacción.
- Evita ennegrecimientos de las paredes debido a la convección del aire.
ACS solar
Placas solares para ACS, qué son y qué ventajas aportan
Las placas solares para ACS son las mejores aliadas para aprovechar la energía renovable proveniente del Sol. También conocido como conversión térmica a bajas temperaturas, este proceso es posible gracias a los captadores solares.
Estos aparatos tienen el objetivo principal de aprovechar el máximo posible los rayos solares para disminuir el uso de las calderas en el proceso de calefacción de agua sanitaria.
Sin embargo, no podemos limitar las ventajas de las placas solares para ACS en ese aspecto. Aquí mencionamos otros beneficios:
- Alto rendimiento: la instalación de placas solares puede generar suficiente agua; incluso es capaz de cubrir el 80% de las necesidades de una vivienda.
- Fuente inagotable: solo basta tener Sol para que los paneles solares funcionen, así que la fuente de energía es inagotable.
- Bajo mantenimiento: una sola revisión anual bastará para verificar que los paneles estén en buenas condiciones.
- Recuperación de la inversión: aunque la instalación de este sistema de energía renovable pueda resultar costoso, con el paso del tiempo no tendrás que gastar más dinero en combustible ni en altos consumos en las facturas.
Aerotermia
¿Qué es la aerotermia?
Aerotermia es una fuente de energía renovable que aprovecha la energía almacenada en forma de calor en el aire que nos rodea y que nos permite cubrir la demanda de calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración en un local o vivienda.
Los aparatos que utiliza la aerotermia para funcionar son las bombas de calor aerotérmicas, que extraen hasta un 80% de la energía del aire para generar calor o frío, lo que las convierte en una de las tecnologías más eficientes que existen para climatizar.
¿Cómo funciona la aerotermia?
El funcionamiento de la aerotermia se basa en los principios de la termodinámica: transportar el calor del aire (energía térmica) de un ambiente a otro. A través de una bomba de calor se recupera del aire la energía térmica existente y se hace pasar por un circuito lleno de refrigerante en el que se produce un intercambio de temperaturas.
En este circuito, el refrigerante va cambiando de estado de gas a líquido con la ayuda de un compresor. El gas durante este proceso, cede su temperatura al aire o a un circuito de agua caliente al circular por el intercambiador. Este intercambiador se encargará de transmitir la energía generada al circuito de calefacción y agua caliente sanitaria de su vivienda.